¿Qué hay detrás del cierre de Google Glass?

Era nada menos que el gatget que marcaría el futuro de las TICs. Un dispositivo futurista con diseño de alta moda cuya historia incluye hasta un triángulo amoroso y un divorcio millonario. ¿Qué pasó con Google Glass?

Desde su presentación en 2012, las gafas inteligentes de Google desataron la fiebre por los wereables. Envueltos en una fanfarria sin fin, fueron probados por presidentes, CEOs, celebridades y gurúes tecnológicos. Sin embargo, el proyecto tal como se lo conoce, terminó.

Google retiró sus Glass del mercado para rediseñar todo el proyecto desde cero. "Como parte de esta transición, estamos cerrando el Explorer Program para poder centrarnos en lo que vendrá después", explica la compañía. "Mientras tanto, continuaremos construyendo el futuro, y usted comenzará a ver las nuevas versiones cuando estén listas", agregó.

¿Cómo hace un proyecto para pasar de ser la cara del futuro a una nueva hoja en blanco? Según reportaron fuentes de la compañía a The New York Times, "el equipo de las Google Glass sabía que el producto ni siquiera estaba cerca de estar listo para la venta". Sin embargo, luego de vender una tirada limitada de su modelo Explorer a 1.500 dólares, el cofundador de Google Sergey Brin decidió lanzar el modelo al público. Pero las Glass no estaban listas.



Cuando el periodismo tech recibió finalmente los anhelados anteojos no dudo en llamarlo "el peor producto del año". Bugs, una batería excesivamente corta, problemas en el funcionamiento y el problema de la privacidad de fondo empezaron a opacar las gafas.

El escándalo amoroso en el seno de Google fue la piedra de toque. Brin comenzó un affair con Amanda Rosenberg, una manager de marketing en Google Glass quien luego lo dejó por otro trabajador de la compañía. La esposa de Brin y Rosenberg eran grandes amigas. El proyecto quedó paralizado y Brin dejó de aparecer en público con los anteojos.

La resurrección de las Google Glass

Sin embargo, no es el final para las gafas de Google. La división pasó a ser comandada por Ivy Ross y Tony Fadell, un ex ejecutivo de Apple y creador de Nest, compañía recientemente adquirida por los de Mountain View.

"Los esfuerzos tempranos de estas gafas han abierto camino y nos han permitido aprender que es importante para los consumidores y las empresas. Estoy emocionado de trabajar con Ivy y proporcionarle dirección y soporte, mientras ella dirige el equipo trabajamos juntos para integrar nuestros conocimientos en productos futuros", dijo Fadell.

La estrategia del ex Apple será comenzar a diseñar el producto desde cero y evitar la experimentación pública. "Tony es un tipo de producto y no va a liberar algo hasta que esté perfecto", comentó un asesor de Fadell. A casi tres años de su presentación, se desconoce cuánto tiempo pasará hasta volver a ver las gafas inteligentes de Google.

Más información: www.google.com.