Feuerstein: “Somos objetos de análisis voluntaria e involuntariamente"

23 de Mayo de 2016
La semana pasada, el Café de las Ciencias abordó un debate integral sobre el manejo de grandes volúmenes de datos. ¿Cuáles son los desafíos éticos de la gran tendencia TIC?

Big Data, el manejo y lectura de grandes volúmenes de datos, es la clave de la nueva era tecnológica. Sin embargo ¿a dónde va a parar la información que damos? ¿Quiénes son los dueños de esos datos y qué uso le dan?

La semana pasada, el ciclo de charlas del Polo Científico Tecnológico "Café de las Ciencias", planteó un debate ético sobre el Big Data para poner sobre la mesa los dilemas que surgen con esta gran tendencia TIC.



El encuentro tuvo como invitados a Alexis Hannart, director adjunto del Instituto Franco-Argentino de Estudios del Clima y sus Impactos (IFAECI) y a Esteban Feuerstein, director departamental de Informática en la UBA y director ejecutivo de la Fundación Sadosky.

Somos objetos de análisis voluntaria e involuntariamente, esta es la especificidad que parte de la naturaleza dinámica y voluminosa de Big Data", explicó Feuerstein en el Polo Científico Tecnológico.

"Se trata de la posibilidad de relacionar datos y obtener información nueva, relevante e individualizada, desde estados de ánimo en una red social hasta información sobre dónde me encuentro o qué preferencias de consumo tengo”, agregó.



Debatir para no caer en "visiones apocalípticas" del Big Data

En un nuevo contexto donde el mundo está innundado de información y todos los datos están digitalizados y almacenados, el debate sobre el Big Data en el "Café de las Ciencias" abordó distintos ejes legales –como ausencia de un marco normativo–, empresariales y éticos.

Sin embargo, ¿todos son riesgos en el mundo de los datos? Alexis Hannart habló de beneficios asociados a la capacidad de almacenar y digitalizar información valiosa que "puede ser aprovechada en ámbitos tan diversos como la salud y el transporte público, la meteorología, la ciber-seguridad, la agronomía y la distribución de energía".



El directivo de IFAECI propuso que los datos que damos se borren en cierto plazo y habló de “una efervescencia en los diferentes sectores que hacen uso de los datos, a partir de la cual se pueden detectar tendencias y desafíos tecnológicos, mal usos y retos éticos que hay que tener en cuenta para la comprensión de esta tecnología y su impacto en la vida de todos”.