Todo como servicio, el aliado de las empresas

Por Sebastián Borghello, Jefe de Producto y Mercado de FiberCorp.

Cualquier tipo de empresa puede acceder hoy a tecnología de punta para apoyar su negocio. La posibilidad de contar con la mejor infraestructura (IaaS, Infrastructure as a Service), la mejor plataforma (PaaS, Platform as a Service), la mejor disponibilidad de información, software y servicios informáticos (SaaS, Software as a Service), se resume en una sola expresión: Todo como Servicio, o Everything as a service, en inglés.

Las empresas que ya entendieron el valor de estar conectadas, son ahora las que más chances tienen de aprovechar esta posibilidad que brinda el mercado de las nuevas tecnologías de la información.

Todo como servicio se erige como la solución más eficiente dentro del mercado de computación en la nube y también como la tendencia más importante de los próximos años, que verá su mayor impacto en los segmentos de Big Data y de TIC. Con Everything as a service, es posible contratar servicios básicos de conectividad, correo electrónico y hosting, y luego agregar prestaciones de valor, como videovigilancia, colaboración y comunicaciones unificadas, entre otras posibilidades.

Aquí se contempla desde el almacenamiento de información hasta la provisión de soluciones más complejas, como el streaming de video para capacitaciones, análisis de comportamiento de consumo u observación de errores o prácticas ineficientes en centros de logística y distribución, por sólo mencionar algunos casos.

Contratar soluciones bajo esta modalidad tiene la ventaja de ser flexible y de adaptarse a lo que una empresa necesita en cada uno de sus ciclos. Su principal característica es que se contratan aquellas prestaciones que se requieran para responder a necesidades puntuales del negocio, sin necesidad de tener que realizar una gran inversión al inicio y con la posibilidad de discontinuar con el servicio en cualquier momento.

Además, las empresas siempre estarán actualizadas con las últimas versiones de las soluciones, sin tener que pagar para ello, ya que es un valor agregado del servicio. Luego, se pueden sumar otros recursos, a medida que la organización se hace más compleja o experimenta ciclos de crecimiento, e inclusive, de crisis, donde la tecnología se vuelve un aliado indispensable para el negocio.