Opinión
Cuatro tendencias clave para liderar el futuro tecnológico en 2025
17 de Febrero de 2025Escribe Rodolfo Armellini, Vicepresidente y Director General de Kyndryl para América Latina y el Suroeste
La industria tecnológica se enfrenta a una serie de desafíos y oportunidades que marcarán el rumbo de las empresas en los próximos años. Desde la ciberseguridad hasta la inteligencia artificial (IA), pasando por la gestión y calidad de los datos y la modernización de aplicaciones, las proyecciones son claras: el futuro será 100% digital, pero también más seguro y optimizado.
En este contexto, me propongo abordar las cuatro principales proyecciones que, de acuerdo con las tendencias actuales, serán clave para el futuro de la tecnología en Argentina y América Latina en 2025.
1. Modernización de aplicaciones: la necesidad urgente del sector financiero
La modernización de aplicaciones será un aspecto fundamental en 2025, sobre todo en sectores como la banca. Muchas de las grandes empresas aún dependen de aplicaciones construidas en lenguajes de programación antiguos, que son cada vez más difíciles de mantener y de disponer de nuevas funcionalidades de acuerdo con lo que el mercado espera. En el sector bancario, especialmente, estamos viendo un impulso hacia la modernización de aplicaciones para adaptarse mejor a las demandas del mercado y mejorar la eficiencia operativa. Hoy, por ejemplo, estamos llevando adelante proyectos con bancos localizados en Latinoamérica, donde luego de un análisis conjunto con nuestros clientes, modernizamos sus aplicaciones de códigos antiguos a nuevos.
Esta modernización no solo implica la adopción de nuevas tecnologías, sino también una revisión profunda de los procesos para mejorar el “go to market” y la experiencia del cliente.
2. La ciberseguridad es una prioridad estratégica para las empresas
El panorama de la ciberseguridad ha cambiado drásticamente en los últimos años: siguiendo el último Readiness Report de Kyndryl, el 65% de los líderes empresariales está preocupado por los ciberataques, y solo el 30% se siente preparado para gestionarlo.
Latinoamérica, por ejemplo, ha sido históricamente una de las regiones con menor inversión en ciberseguridad, pero esto está comenzando a cambiar. En 2024, observamos un aumento significativo en los incidentes de seguridad y las brechas en nuestros clientes. Ya no se trata de una cuestión técnica, sino de una verdadera prioridad para las organizaciones. Los gerentes generales ahora comprenden que una empresa puede ir a la quiebra si no poseen medidas mitigadoras de riesgo frente al cuidado de datos. En este sentido podemos decir que sus empleos como gerentes pueden inclusive estar en riesgo al no tomar medidas adecuadas en el frente de la ciberseguridad.
En 2025, las políticas de seguridad, el monitoreo proactivo y la migración a la nube serán tendencias clave. No se trata solo de adquirir productos de seguridad, sino de estructurar adecuadamente las plataformas y sistemas para garantizar una protección integral frente a amenazas, que en muchos casos ya están presentes en la región.
3. Data: calidad, gobernanza y estructuras eficientes
La gestión de datos, lejos de ser una cuestión de almacenar grandes volúmenes de información, se está enfocando cada vez más en la calidad y gobernanza. Los proyectos de datos en 2025 estarán centrados en optimizar la estructura de datos para facilitar la toma de decisiones. Las organizaciones ya no pueden permitirse perder tiempo e invertir recursos navegando en mares de datos no estructurados. La clave será la eficiencia: contar con una arquitectura de datos que comprima la información y la haga accesible cuando sea necesario, especialmente para alimentar proyectos de IA.
4. La transformación de la IA ya está en marcha
La inteligencia artificial continuará siendo uno de los temas centrales de discusión en 2025. Si bien no se espera que el mercado cumpla todas las expectativas que se han generado en torno a la IA, lo cierto es que las organizaciones están aprendiendo valiosas lecciones. El significado de pruebas de concepto (POC) se ha instalado como una metodología crucial antes de lanzar proyectos de IA a gran escala. En lugar de apostar a ciegas, las empresas están empezando a validar el impacto de la IA en sus procesos de negocio, lo cual es un paso importante para garantizar el éxito a largo plazo.
Según el Kyndryl Readiness Report que realizamos hace algunos meses basado en la opinión de 3.200 líderes empresariales, el 31% de las empresas tienen dificultades para adoptar la IA por miedo de la privacidad de los datos, el 30% por la incertidumbre del retorno de inversión que dejará y un 26% por problemas de cumplimiento. Esto demuestra que aún queda un camino muy largo por recorrer con esta tecnología en el mundo corporativo.
Un 2025 de grandes desafíos, pero también de oportunidades.
A medida que las empresas se adaptan a estas nuevas tendencias tecnológicas, el desafío estará en tomar decisiones rápidas y eficaces. La ciberseguridad, la inteligencia artificial, la calidad de los datos y la modernización de aplicaciones son áreas en las que las organizaciones deberán invertir no solo dinero, sino también tiempo y recursos humanos para garantizar su éxito en 2025. Las empresas que logren gestionar estos aspectos de manera eficiente estarán mejor posicionadas para liderar en un mercado cada vez más competitivo y digital.
(*) Rodolfo Armellini: Vicepresidente y Director General de Kyndryl para América Latina y el Suroeste